Pero a pesar de su devota fe católica, la mujer de 74 años nunca se sintió impulsada a actuar contra la doble crisis que perjudica a la creación.
«Pensé que era demasiado vieja y que los cambios que se hicieran no me afectarían», dijo.
Pero a principios de este año, su actitud ante la crisis climática cambió.
Vio a su tímida nieta de 13 años yendo de puerta en puerta en Pensilvania, haciendo campaña por el senador estadounidense Bernie Sanders en las primarias presidenciales del partido demócrata. El principal tema que la motivaba: el cambio climático.
Kit recuerda haber pensado: «Será mejor que empiece a prestar atención a esto».
Por esos días, su párroco mencionó el retiro de dos días del Movimiento Católico Mundial por el Clima que se realizaría en línea antes de la Semana Laudato Si’.
Kit asistió al retiro. Se conectó con personas de seis continentes, mujeres y hombres como ella que se unían por su amor a la creación.
«De repente me di cuenta de que todo esto está conectado. Después del retiro me sentí inspirada a hacer algo», dijo.
Desde entonces, ha hecho conocer a sus compañeros feligreses la Laudato Si’, ha llevado el mensaje esperanzador de la encíclica a los comités de la iglesia y ha ayudado a los jóvenes a descubrir que la Iglesia Católica considera la crisis climática como uno de los mayores problemas del mundo.
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«El Espíritu Santo realmente me persiguió», dijo. «No podía sacármelo de la cabeza, dije: ‘Tengo que pasar la voz'».
Kit ve a Laudato Si’ principalmente como una forma de asegurarse de que la generación más joven se mantenga comprometida e involucrada con la Iglesia Católica mundial.
Las encuestas muestran constantemente que los jóvenes califican la crisis climática como un problema mayor que las generaciones mayores. Una encuesta realizada por Gallup en 2018 mostró que el 70 por ciento de las personas de 18 a 34 años en los EE.UU. se preocupan por el calentamiento global, en comparación con el 56 por ciento del grupo de 55 años o más.
«Esto es algo en lo que podemos tener un interés común que lleva a cuestiones de justicia social e interés por los pobres. Creo que muchos de los jóvenes no están tan interesados en la liturgia o incluso en la teología a la antigua, pero sí en esto. Creo que tenemos que hacerles saber que, ‘Sí, la Iglesia Católica también está en esto'», dijo.
Ella lidera con el ejemplo en Pennsylvania, ayudando tanto a sus colegas como a los jóvenes a experimentar la Laudato Si’.
Después del retiro, empezó a escribir un anuncio del «Rincón Laudato Si'» en el boletín semanal de su parroquia. Inmediatamente, escuchó de gente como ella.
«Dijeron casi exactamente lo que yo dije. Tienen 70 años, son abuelos, y pensaron que era una forma de conectar con sus nietos», dijo.
Kit también llevó el mensaje esperanzador de Laudato Si’ a los comités de justicia y paz establecidos desde hace tiempo en la iglesia, y se conectó con el ministerio juvenil. Sugirió que los jóvenes de la parroquia organizaran un evento para el Tiempo de la Creación de hace poco.
«Kit fue la inspiración para nuestra caminata de la creación adolescente», dijo Paul Cillo, el asociado pastoral de la parroquia para el Ministerio de Jóvenes y Adultos Jóvenes. » Resaltó el Tiempo de la Creación y nos animó a encontrar formas de apreciar la creación y cuidarla. Desde el principio, quiso incluir a los jóvenes en este importante asunto».
Paul también atribuyó a Kit el hecho de asegurarse de que los católicos se centraran en el mensaje de esperanza y acción del Papa Francisco por nuestra casa común.
«Como católicos estamos llamados a vivir el Evangelio en todas las áreas de nuestra vida, y hay muchos temas que requieren nuestra atención. Kit continúa ayudándonos a equilibrar nuestra atención en todos los temas, especialmente el cuidado de nuestra casa común», dijo.
El mes pasado, Kit intensificó su activismo convirtiéndose en Animadora Laudato Si’. Durante las seis semanas de entrenamiento, se conectó con miles de católicos apasionados de todo el mundo y aprendió sobre las causas fundamentales de la crisis climática, así como los temas centrales de Laudato Si’.
La flamante activista del clima no tiene una meta establecida de cuántas personas quiere alcanzar o una perspectiva de cinco años de cómo seguirá compartiendo la encíclica que cambia el mundo. Sólo quiere que todos lean y aprendan de Laudato Si’.
«No tengo un plan de acción aquí», dijo. «Sin embargo, puedo poner a la gente en contacto con la encíclica, que es lo que quiero hacer, y tal vez de allí se pasará a más acción.»
Kit aún no ha hablado con su nieta sobre la crisis climática. Pero cuando su nieta esté lista para hablar, Kit estará más que preparada para la conversación.
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