El Espíritu Santo está actuando en la Iglesia y en todo el Movimiento Laudato Si’, inspirando formas nuevas y transformadoras de cuidar nuestra casa común. Un ejemplo reciente de esta gracia es el reconocimiento de Fran Ludwig, fundadora y directora del Capítulo del Movimiento Laudato Si’ de Boston, con el Premio Isaac Hecker 2023 por la Justicia Social. 

El premio, concedido por el Centro Paulista de Boston, honra a personas que han hecho contribuciones significativas a causas de justicia social. En el pasado, este premio lo ganaron célebres católicos estadounidenses defensores de la justicia social, como Dorothy Day y César Chávez. Para Fran y su trabajo en el ministerio del cuidado de la creación, este reconocimiento destaca las profundas raíces espirituales y el creciente impacto de la gestión medioambiental en la comunidad católica.

Fran durante la misa de celebración

Un gran honor que repercute en la comunidad

Fran compartió con el Movimiento Laudato Si’ sus pensamientos sobre su incorporación a la lista de antiguos premiados. “Me sorprendió y me sentí profundamente honrada”, dijo, pues no esperaba tal reconocimiento. “El trabajo por la justicia social tiene muchos líderes dotados”, añadió, reflexionando sobre la profundidad del talento y el compromiso en el espacio de la justicia social católica.

Su humilde respuesta subraya el espíritu de colaboración del movimiento, que pretende hacer frente a la crisis medioambiental global no sólo con esfuerzos individuales, sino fomentando el compromiso de toda la comunidad. El liderazgo de Fran ha convertido al capítulo local de Boston en un modelo de integración de la contemplación espiritual y la acción concreta.

Fran destacó que uno de los resultados más gratificantes de recibir el premio es la mayor visibilidad que aporta al ministerio del cuidado de la creación: “El mero hecho de recibir un premio ha atraído la atención de la archidiócesis de Boston sobre el capítulo y sobre mí”, dijo, y añadió que refuerza en los miembros de su equipo la idea de que su trabajo es una parte vital de la misión más amplia de justicia social de la Iglesia.

Fran con su familia

Una alegre celebración del cuidado de la creación

El 28 de septiembre hubo una misa para celebrar el premio. “Me gustaría compartir este premio con todos aquellos que se han dedicado a cuidar de nuestra Casa Común y de todos sus habitantes”, dijo Fran durante la ceremonia. También habló con cariño de su mentor, al que conoció de niña y que influyó en su camino hacia el cuidado de la creación.

El Premio Isaac Hecker es un merecido homenaje a la dedicación de Fran durante décadas al cuidado de la creación. Isaac Hecker, fundador de los Padres Paulistas en el siglo XIX, creía en la importancia de la fe en acción, especialmente dentro de la Iglesia estadounidense. En la actualidad, Fran Ludwig encarna ese mismo espíritu, demostrando que el cuidado de nuestra casa común no es sólo una cuestión medioambiental, sino un profundo acto de justicia social.

Mientras Fran y su equipo prosiguen su labor, la presencia del Espíritu Santo es inconfundible: nos guía, nos inspira y nos impulsa a todos a adoptar formas nuevas y audaces de cuidar de nuestro mundo, como Fran ha hecho durante tantos años.

Su liderazgo es un testimonio del poder de la acción religiosa en la lucha por la justicia medioambiental. Que su ejemplo siga inspirándonos a todos para cuidar de nuestra casa común.